Res és infinit, i no es trist, és vida

Res és infinit, i no es trist, és vida

dilluns, 22 d’agost del 2011

Libertad...


Érase una vez un pájaro, adornado con un par de alas perfectas y plumas relucientes, coloridas y maravillosas. En fin, un animal hecho para volar libre e independiente, para alegrar a quien lo observase. Un día una mujer lo vio y se enamoró de él. Se quedó mirando su vuelo con la boca abierta de admiración, con el corazón latiéndole más de prisa, con los ojos brillantes de emoción. Lo invitó a volar con ella, y los dos viajaron por el cielo en completa armonía. Ella admiraba, veneraba, adoraba al pájaro.
Pero entonces pensó: ''¡Tal vez quiera conocer algunas montañas distantes!''. Y la mujer tuvo miedo. Miedo de no volver a sentir eso por otro pájaro. Sintió envidia. Se sintió sola
Y pensó: ''Voy a poner una trampa. La próxima vez que el pájaro venga, no volverá a marcharse''.
El pájaro que también estaba enamorado, volvío al día siguiente, cayo en la trampa y fue encerrado en la jaula. Todos los días ella miraba al pájaro. Allí estaba el objeto de su pasión, y se lo enseñaba a todas sus amigas, que comentaban: ''Eres una persona que lo tiene todo''. Sin embargo, empezó a producirse una extraña transformación: como tenia al pájaro, y ya no tenia que conquistarlo, fue perdiendo el interés. El pájaro sin poder volar ni expresar el sentido de su vida, se fue consumiendo, perdiendo el brillo, se puso feo y ella ya no le prestaba atención.
Un buen día el pájaro murío. Ella se puso triste, y no dejaba de pensar en él. Pero no recodaba la jaula, recordaba sólo el día que lo había visto por primera vez, volando contento entre las nubes.
Si profundizase en sí misma se daría cuenta que aquello que la emocionaba tanto del pájaro era su libertad, la energía de las alas en movimiento, no su cuerpo físico.
Sin el pájaro, su vida también perdió el sentido, y la muerte vino a llamar a su puerta. ''¿Por qué has venido?'' , le preguntó la muerte. ''Para que puedas volar de nuevo con él por el cielo -respondió la muerte-. Si lo hubieses dejado partir y volver siempre, lo admirarías y lo amarías todavía más; sin embargo ahora necesitas de mí para poder encontrarlo de nuevo.''


"Once Minutos" - Paulo Coelho

dijous, 18 d’agost del 2011

Pronto la situación cambiará, de hecho ya está cambiando... cada día se van originando cambios que van dando forma a este presente que estamos viviendo, y que poco a poco va mejorando. Los malos momentos pasan, como también pasan los trenes por la estación, y aunque ahora no es un buen momento, hay que seguir viviéndolo con alegría y optimismo, subirnos al tren de la vida, para vivirla y luchar por nuestros sueños. No hay que quedarse sentado viendo como pasa nuestro pasado, futuro y presente, simplemente hay que vivir, con lo que se tiene y como se pueda, pero siempre disfrutando cada minuto, cada momento, cada sonrisa, y cada palabra como si fuera el más importante, y aunque los problemas sigan estando en ese momento, intentar que todas esas cosas positivas se unan para hacer que se difuminen, y así... soñar cosas bonitas...

Para mi pequeñajo, mi vida... te subes al tren conmigo?

No ignores los problemas, pero tampoco vivas de ellos... vive la vida!

SONRIE =)

dilluns, 25 de juliol del 2011

Hoy es uno de esos días, que no sabes bien por qué, miras atrás y recuerdas a esas personas que tanto marcaron en tu vida, que tan pronto entraron en tu corazón, y tan rápido se fueron dejando un trocito muy importante de ellas para nunca olvidarles. Cada día les diría mil cosas, y desearía poder estar con esas personas para seguir compartiendo momentos de la vida. Y aunque siempre pensaré con esas personitas tan especiales, ahora es tiempo de dedicarle tiempo y esfuerzo a aquellas personas más importantes de mi vida, que ahora están presentes, que también lo merecen y espero tener siempre a mi lado.